Vigilancia ecológica en Laguna Garzón con un enfoque en su biodiversidad

La importancia de los monitoreos de fauna nativa.

La Laguna Garzón, un área de manejo de hábitat y especies, ha sido un punto focal de estudios ecológicos desde el año 2020.

Los monitoreos de fauna realizados en esta zona son vitales para comprender la diversidad, abundancia y distribución de diferentes especies animales.

Estos incluyen mamíferos, aves acuáticas y especies exóticas invasoras (EEI), todas fundamentales para entender el estado de conservación y los cambios que ocurren en sus poblaciones.

Monitoreo de mamíferos en Uruguay

Desde el inicio de los estudios en 2020, el monitoreo de mamíferos ha sido una práctica constante en la Laguna Garzón.

Hasta la fecha, se han identificado al menos 12 especies diferentes, incluyendo algunas prioritarias para la conservación como el Margay y el Tucu tucu.

Este trabajo se realiza en colaboración con el CURE y la Fundación Lagunas Costeras, así como con propietarios locales que facilitan la instalación de cámaras trampa.

Estas herramientas no solo sirven para la investigación, sino también para sensibilizar y divulgar la importancia de la biodiversidad local.

Aves acuáticas

Las aves acuáticas, por su relevancia ecológica, también son monitoreadas continuamente. Desde el 2020, se han realizado observaciones en seis puntos clave de la laguna.

Este lugar, crucial para la alimentación y descanso de las aves, comparte espacio con deportes náuticos como el kitesurf.

Los estudios han revelado cómo estas actividades recreativas afectan a las aves, lo que ha llevado a implementar medidas de gestión para equilibrar la conservación con el uso recreativo.

Hasta ahora, se han registrado unas 65 especies de aves, incluyendo algunas amenazadas como el Flamenco austral.

El desafío de las especies exóticas invasoras

Otro aspecto clave del monitoreo en Laguna Garzón es la detección de especies exóticas invasoras como el Ciervo Axis, el Jabalí o el Estornino pinto.

El equipo de guardaparques juega un rol valioso en esta tarea, realizando seguimientos periódicos y colaborando con la comunidad local y organizaciones civiles. La identificación temprana de estas especies es esencial para el desarrollo de planes de control efectivos.

Métodos de recolección y análisis de datos

La recopilación de datos se lleva a cabo mediante diversas metodologías, incluyendo la toma de muestras de tejidos o fecas, fotografías, conteos, observaciones a campo y la revisión de cámaras trampa.

Todo esto se apoya en plataformas digitales de ciencia ciudadana como Inaturalist, eBird, Epicollect y MiSurvey123, fortaleciendo la participación comunitaria a través de jornadas de capacitación.

El siguiente vídeo, disponible en el canal de Youtube del Ministerio de Ambiente, podemos ver el momento que la cámara capta al presencia de un margay.

El margay es una diminuta especie felina que se encuentra en la vasta extensión de América Central y del Sur, prospera en la soledad de su existencia nocturna.

Este esquivo gato montés prefiere llamar hogar a los bosques primarios de hoja perenne y caducifolios.

Futuro y desafíos para el monitoreo de nuestra fauna

El principal desafío para 2024 es la consolidación y ejecución de un nuevo Programa de Monitoreo que profundice el trabajo ya realizado.

Estos esfuerzos son esenciales para definir medidas de gestión adecuadas y evaluar su eficacia, ajustándolas según sea necesario.

La Laguna Garzón sigue siendo un modelo de estudio y conservación, demostrando la importancia de la vigilancia ecológica para proteger y entender mejor nuestro entorno natural.

— Fuente: Ministerio de Ambiente. Foto de portada: Airel Farías, CURE-Udelar.